Hace algunos años, realicé un estudio con nueve empresas del país, maduras y de diferentes sectores económicos. En esta investigación, se estudió cada uno de los elementos claves del modelo de negocio. Recordé este estudio porque arrojó enseñanzas frente a la innovación, los cuales hoy, en tiempo de crisis, pueden ser útiles para emprendedores y empresarios.

Líderes con visión clara. Los modelos de negocio exitosos son aquellos que se reinventan (modifican, cambian); pero esto requiere de líderes dispuestos a experimentar para descubrir qué puede funcionar o qué puede ir mal.

Repensemos (pensemos de nuevo) nuestra estrategia competitiva. El análisis de la estrategia es un paso clave en el diseño de un modelo de negocio sostenible, ya que su ejecución depende de cómo interactúan todos los elementos que lo conforman.

Investigación del entorno, la industria y las tendencias. Es clave no subestimar este tipo de investigación. Estudiar esas variables que impactan nuestro modelo de negocio nos permite armar un plan de contingencia, mitigar el riesgo y contemplar estrategias que antes no habían sido consideradas.

Equipos creativosque asuman riesgos y que inspiren, pero no solo en las empresas, sino en toda la cadena de valor. Si están rodeados del mejor talento, no lo dejen ir. Los clientes externos son los reyes; y los proveedores y distribuidores, los aliados estratégicos.

Revisen su propuesta de valor. Recuerden que aquí todo es dinámico. Revisen si siguen teniendo un diferencial, y si los beneficios que están entregando continúan siendo valorados por los segmentos objetivo.

Cambio en el enfoque para capturar valor. Debemos procurar que el diseño del modelo de negocio aborde un triple beneficio, es decir que, además de generar beneficios económicos para todos los involucrados, también debe tener un efecto favorable en el medio ambiente, en la sociedad o en ambos.

Buscar complementariedad y eficiencia. Esto entra en conflicto con la configuración de activos tradicionales de las empresas y con la resistencia de los directivos. La gestión de una empresa exitosa requiere del trabajo conjunto con otras empresas, para crear soluciones integradas que puedan satisfacer necesidades.

Innovación abierta. Es una forma para que las empresas aprovechen la creatividad y la innovación interna, y la complementen con fuentes externas.

Aprender de los procesos de prueba y error. Los procesos de experimentación son muy valiosos porque permiten un conocimiento profundo de los clientes, además de saber qué tanta aceptación está teniendo nuestra propuesta y si nos van a comprar.

Recuerden que aquí todo es dinámico. Revisen si siguen teniendo un diferencial y si los beneficios que están entregando continúan siendo valorados por los segmentos objetivo.

Cualquier decisión frente a los nuevos o existentes modelos de negocio debe ser enriquecida por decisiones estratégicas visionadas y lideradas por fundadores de mente abierta, flexibles y con una actitud favorable para aprovechar y aceptar los cambios.