Jury Figueroa Cortina, graduada de la Maestría en Enfermería de la Universidad de La Sabana, desarrolló una intervención educativa para favorecer la seguridad del lactante menor, en torno a su momento de descanso. “Como enfermera clínica, la mayor responsabilidad es cuidar del paciente. Sin embargo, desde el ámbito educativo, la enfermería puede favorecer a la persona, pues se incrementarán las capacidades de autocuidado, tanto del paciente como de su familia, y habrá un mayor valor en la promoción de la salud”.

El síndrome infantil de muerte súbita no tiene una causa evidente y, generalmente, se encuentra al niño sin signos vitales después de haberlo puesto a dormir, sin haber sufrido. En su tesis, Jury describe otras causas de muerte en bebés relacionadas con el sueño: asfixia, atrapamiento y estrangulación. El 90 % de los casos de este síndrome se da entre el primero y el cuarto mes de edad.

Figueroa, con base en la Práctica de Sueño Seguro de la Academia Americana de Pediatría, aporta las siguientes recomendaciones:

• Para dormir, durante la siesta y por la noche, coloca boca arriba al bebé, sobre una superficie firme y plana.
• No coloques ni juguetes, ni peluches, ni protectores de cuna o cobertores de manera suelta o debajo del bebé, ni cualquier otro objeto.
• Compartir el dormitorio, pero no la cama. Esto reduce el síndrome hasta en un 50%.
• Ni fumes ni consumas alcohol o drogas ilícitas en la zona en la que se encuentra el bebé. Además, por supuesto, evita la exposición del bebé a estas sustancias.
• Evita el sobrecalentamiento. Revisa los signos de sobrecalentamiento, como sudoración y sensación caliente al tacto con la piel. Mantén la cabeza y la cara del bebé descubiertas cuando duerme.
• Contacto piel a piel. Se recomienda que apenas nazca el bebé, la madre lo sostenga muy cerca al menos por una hora.
• Lactancia materna libre de demanda. La leche materna trae consigo excelentes beneficios para la salud de la madre y del bebé.
• Tiempo boca abajo con supervisión. Coloca al bebé boca abajo cuando esté despierto; asegúrate de que alguien lo vigile en todo momento. La posición boca abajo ayuda a fortalecerle el cuello, los hombros y los músculos del brazo y evita el aplanamiento de la parte posterior de su cabeza.
• Ofrécele un chupo. Este no debe estar sujeto con lazos a la ropa, a los juguetes o las mantas. Si el chupo se cae, no se requiere ponerlo de nuevo mientras duerme.
• No uses dispositivos comerciales que dicen prevenir la muerte súbita. De hecho, muchos de estos productos tienen el efecto contrario si se utilizan donde duerme el bebé.
• Ten las vacunas al día.
• Comparte la educación sobre este tema con tus familiares.

Esta tesis fue dirigida por la decana de la Facultad de Enfermería y Rehabilitación, la doctora Gloria Carvajal Carrascal, quien comenta que “Una intervención educativa sistematizada como la que propone Durmiendo Seguro apunta a fortalecer de manera anticipada los conocimientos, habilidades y adherencia de las madres, padres y cuidadores respecto a las recomendaciones sobre sueño seguro en los lactantes, y se convierte en una estrategia que contribuye a su seguridad y bienestar”.

Por su parte, Jury le agradece a la doctora Gloria por su acompañamiento. “El valor investigativo que tiene este proyecto es gracias a ella, porque creyó en mí y me apoyó de manera incondicional. La doctora Carvajal es una persona brillante”, enfatiza.