Los desafíos de la educación universitaria en el mundo
Campus entrevistó al estudiante para ahondar en este proyecto.
Campus: ¿Cómo influyó la Universidad de La Sabana en su formación y cómo le aportó al avance en la investigación?
Moisés Ulises García: Realicé mi pasantía doctoral en la Universidad de La Sabana porque es reconocida y prestigiosa en Latinoamérica, pero, sobre todo, porque pretende ser de tercera generación, con el foco en la proyección social y la búsqueda de un impacto en el entorno, aprovechando los logros como una universidad de primera (docencia) y segunda generación (investigación). Esto representa un gran atractivo en mi tesis doctoral. La Universidad de La Sabana busca la proyección de la persona en el ámbito profesional y personal. Muchas de las universidades en el mundo enfocan sus esfuerzos en aspectos materiales o puramente económicos y no en la formación integral de la persona y el cuidado de su dignidad.
C: ¿Cómo se relaciona su investigación doctoral con la pasantía?
M.U.G: En este momento, me encuentro realizando un estado del arte sobre los desafíos de la educación universitaria en el mundo. La Universidad de La Sabana, con su Biblioteca, me ha facilitado el acceso a muchas herramientas para fortalecer y potenciar mis búsquedas. Las interacciones con los profesores e investigadores internacionales y locales, y con mi directora de tesis doctoral, Luz Yolanda Sandoval, me han permitido profundizar en cómo articular la tradición y el progreso, la identidad y el cambio, y conocer cómo se gestiona el currículo en la Universidad de La Sabana con la Dirección Curricular, que apoya a las diferentes unidades académicas en los procesos de creación y calidad de los programas y en su proyecto de transformación curricular.
He avanzado en el estudio y el análisis de 38 artículos que había seleccionado y sistematizado antes de esta estancia doctoral. Identifiqué y argumenté los diez retos más destacados de la educación universitaria en el mundo, así como también los modelos y enfoques curriculares más relevantes, que serán publicados próximamente.
C: ¿Cómo aporta La Sabana a su investigación doctoral?
M.U.G: Aquí me he sentido como en casa, porque el trato ha sido de amabilidad y amistad con quienes me he relacionado en las diferentes unidades académicas. Además, me han brindado los espacios y las herramientas necesarios para continuar con mi trabajo de investigación, apoyando las búsquedas de información con bibliografía física y digital.
Esa apertura ha permitido identificar las necesidades que permitirán un trabajo conjunto entre las universidades de La Sabana y la Católica de El Salvador, orientando esfuerzos en investigación, docencia y, quizás, en la proyección social. Así, se seguirá velando por la calidad en la educación superior, con las mejores ofertas para los estudiantes latinoamericanos y formando a personas de bien para la sociedad, tan necesitada de humanismo.
C: ¿Qué impacto espera lograr con los resultados de su investigación doctoral?
M.U.G: Espero aportar a la Universidad Católica de El Salvador, mi alma mater, porque allí me desempeño como secretario general y, además, porque también es donde curso mi Doctorado en Educación. Este será el fundamento y la estructura curricular propios de las universidades que se inscriben en los desafíos de la quinta revolución industrial: el humanismo pone a la persona en el centro, subordinando los progresos y colocándolos en su verdadera dimensión, para el desarrollo humano y social. Desde esta perspectiva, resulta de gran relevancia conocer muchas más universidades representativas en el mundo, que enfaticen en la innovación pedagógica y curricular para que el ser humano gane protagonismo por encima de las máquinas.
__________________________________________________________________________________________
Finalmente, el estudiante internacional añadió: “Quiero agradecer a la Facultad de Educación y, en particular, al Doctorado en Educación y a la líder de Internacionalización por su acogida durante mi estancia en La Sabana”.
“Las universidades en todo el mundo están cambiando y ese cambio debe ser prioritario en los campos estructural, de recursos, tecnología y herramientas; todos necesarios para facilitar el proceso de enseñanza y aprendizaje, y afrontar los retos en el contexto donde se desenvuelve cada institución”, concluye Moisés.