¿Qué son la estimulación y la sobreestimulación?
La estimulación desde la primera infancia es vital para potenciar las habilidades del ser humano. No solo favorece el desarrollo cognitivo de los niños al aumentar sus conexiones cerebrales, sino que permite desarrollar mejores capacidades físicas, emocionales, sociales y comunicativas. Desde este punto de vista, el papel de los padres es fundamental para brindarle una estimulación adecuada a sus hijos. Sin embargo, es importante tener en cuenta los tiempos, la edad y el ritmo del desarrollo del niño para no sobreestimularlo.
De acuerdo con Ángela Rubiano, profesora de la Facultad de Educación, debemos aprender a cultivar y cuidar el asombro natural de los hijos para no ahogarlos con prácticas propias de lo que se denomina: hiper-educación. Es decir, “Forzar aprendizajes que el niño no está listo para tener o ahogar su atención al permitirle el contacto temprano con, por ejemplo, pantallas de celular o computadores porque generan en su cerebro un círculo de de recompensa, en el que buscará querer más y más de lo mismo. Esto ahoga su creatividad y atención natural”, comentó.
Para la profesora Rubiano, es importante invitar a los educadores y padres de familia a que estimulen la imaginación de los niños de una manera mucho más natural. “Debemos aprender a vincularlos con el entorno y a que jueguen con una piedra, un papel o una caja, donde lo simple les permita preguntarse y cuestionarse el mundo en el que viven”.
Por otro lado, Ángela Marcela Baquero, profesora de la Licenciatura en Educación Infantil, afirma que la sobreestimulación puede generar en los niños estrés, ansiedad y pérdida de motivación por sus actividades. “Un error es acostumbrar a los hijos a rutinas saturadas o esquemas muy rígidos que, en vez de ayudarles, afectan el aprendizaje de forma negativa. Esto puede ocasionarles problemas actitudinales de rebeldía o pataleta, que finalmente les generan frustración”, dijo.
¿En qué consiste la sobreestimulación? ¿Cómo evitarla? En el siguiente podcast encontrarás, con la uía de expertos, lo que debes conocer sobre la estimulación adecuada y la sobreestimulación:
Escucharlos siempre para conocer cuáles son sus motivaciones e identificar sus gustos.
No decidir por ellos. En muchas ocasiones, los padres son los que delimitan y organizan las actividades y tiempos de los niños. Es importante dejar que ellos sean autónomos.
Valorar sus tiempos de ocio y recreación.Es importante que los niños aprendan a estar en calma y disfruten de su tiempo libre.
Permitirles socializar con sus pares. De esta manera, fomentan la creatividad y la innovación mediante el juego con amigos.
Compartir tiempo en familia.