La profecía de Linda Patiño, de estudiante de periodismo a gerente de comunicaciones en Google 

Cuando Linda Patiño estaba aún en la universidad, una profesora del diplomado de Marketing Digital le dijo “usted está como para llegar a Google”. Ese día había llevado un ejemplo de la primera vacante en comunicación que abrió el gigante de la tecnología en Colombia. Para la jóven de 19 años de aquel entonces, los requisitos –10 años de experiencia, trabajo previo en medios, conocimientos en marketing digital– parecían inalcanzables. “Wow, ¿cuándo voy a tener yo la posibilidad de tener una hoja de vida así para aspirar a un puesto de ese estilo?” pensó Patiño. 

Durante los años siguientes Linda trabajó en múltiples compañías, desde universidades hasta medios de comunicación. Fue en uno de los cubrimientos del doodle de Gabriel García Márquez que tuvo chance de visitar por primera vez las instalaciones de Google.  Entonces volvió a entrar en su radar la posibilidad de hacer parte de la compañía y un tiempo después, cuando se abrió una vacante, aplicó. 

“Empecé un proceso de entrevistas que es increíblemente edificante. En Google tienen un formato muy sólido para encontrar cómo resuelves problemas. Pasé mi prueba técnica que fue sumamente desafiante, pero muy creativa. Pasaron muchas rondas, pero cuando ya estaba en el proceso final pasaron meses y no me llamaron. Finalmente supe que la vacante ya no se iba a abrir”, recuerda Linda. 

Su perfil quedó en la base de datos y, posteriormente, cuando se volvió a presentar para otra vacante, la reclutadora encontró su proceso anterior. Todo esto permitió que se agilizara la contratación y que aquel 23 de diciembre de 2021, recibiera la llamada que culminaría ese sueño que años atrás parecía tan descabellada: hacer parte de un gigante de Google y convertirse en Gerente de Comunicaciones para la oficina de Colombia. 

"Muy temprano en mi vida encontré en la tecnología un espacio de expresión y pude usarla para hablar de violencias digitales basadas en género, extorsión, derechos humanos digitales, entre otras” cuenta Linda mientras su mirada se pierde en las memorias de aquel entonces. 

En un mundo donde, según la Unión Internacional de Telecomunicaciónes, 70% de los hombres utiliza Internet, en comparación con el 65% de las mujeres, Linda comenzó a ver cómo los sesgos de género están presentes en todas las industrias. “Es algo con lo que lastimosamente todavía tenemos que luchar. Las mujeres seguimos siendo tres de cada 10 personas dentro del sector de tecnología. Por eso, nuestro rol ha sido muy importante. Hablar de esto me permite ampliar mi impacto, abrirle camino a otras y exponer realidades y brechas que todavía existen. Por eso considero que reivindicar esa imagen de una mujer que puede tener una familia y tener éxito empresarial, con un balance es tan importante”, cuenta. 

De ahí que en su propósito, su esposo sea determinante en su vida. Por ejemplo, en el 2019, cuando quiso escribir su libro "Qué Diablos Hacen los Influencers", el fuera su mano aliada. “Así yo tenga que lavar, planchar, barrer, sacar a los perros, alimentar a la niña y alimentarte a ti mientras estás sentada y solo abres la boca para comer, lo voy a hacer”, dijo. 

Tras noches en vela, Linda logró sacar el proyecto adelante y al final disfrutar un logro compartido. 

“Mi familia ha sido un motor increíble. Yo fui madre a los 21 años y hoy en día estoy aquí con una carrera exitosa y con mi hija de nueve años, que me hace muy feliz. Entonces quiero seguir cuidando a mi familia, esa fuerza que me ha impulsado a llegar hasta donde estoy”, asegura Linda. 

No es casualidad que cuando piensa en esos anhelos venideros se le vengan a la mente los domingos en familia, practicando karate junto a su hija y su marido.  

Dice que quiere ser cinturón negro, mostrarle al mundo que sí es posible ser mamá, tener una vida profesional feliz y poder avanzar en estrategias que ayuden a que haya más mujeres presentes trabajando en el sector de la tecnología. 

Y es que a lo largo de su carrera ha encontrado que una de las claves del éxito también es la disciplina, la misma que la ha llevado a posicionarse como una de las 100 mujeres del selecto grupo reconocido como ‘Women to watch’.  Este premio que es entregado por la revista P&M a las profesionales que gracias a su liderazgo y creatividad transforman el sector de mercadeo, publicidad y comunicaciones, fue entregado a Linda este año posicionándola como una líder del cambio.  

Para Patiño, ganar este galardón es un hito. “Reconoce lo que he hecho en la última década. Cada día de trabajo, voluntariado, de compartir y construir desde el periodismo y, ahora, desde la comunicación corporativa.” 

Además, para Patiño esto significa un voto de confianza a futuro. “Tengo muchas ganas de conectar con otras mujeres y sus propósitos, para crecer juntas. Esto me permite ampliar mi impacto, evidenciar las brechas que todavía existen y, de alguna manera, revindicar esa imagen de una mujer que puede tener una familia, éxito empresarial y un balance”, cuenta la galardonada. 

No cabe duda de que la profecía que surgió en la universidad hoy deja huella no solo en quienes hacen parte de su círculo cercano, también siembra terreno para todas aquellas pequeñas –como su hija– que saldrán a una sociedad con sesgos de género, pero que a los ojos de Patiño tienen a su alcance la rebeldía que implica estar presente en la red siendo mujer. “Cualquier niña, adolescente o mujer que esté leyendo esto debería llevarse una reflexión sobre la curiosidad (...). Pues, al final, en un mundo donde pareciera que todas las respuestas ya existen, lo que hay que aprender es a hacer las preguntas correctas”, finaliza Linda.