¿Sirven los organismos internacionales en tiempos de crisis?

Un organismo internacional es una asociación voluntaria de Estados, creada habitualmente a través de un tratado.

Para hablar de crisis basta con mirar al lado. Según los reportes de prensa de los últimos meses, Venezuela aún no sale de su grave situación, a pesar de que tiene el apoyo de gran parte de la comunidad internacional, que ha desconocido el régimen de Nicolás Maduro y ha dado su respaldo al presidente interino Juan Guaidó. Varios organismos internacionales han alzado la voz frente a esta complicada realidad, pero hay posiciones encontradas frente a la efectividad de estas asociaciones. Para explicar este escenario, se deben responder dos preguntas: ¿qué es un organismo internacional?, ¿hasta qué punto es eficaz al ejercer presión?

Según el Diccionario del Español Jurídico de la Real Academia Española, un organismo internacional es una asociación voluntaria de Estados, creada habitualmente a través de un tratado. Por lo general, está dotada de órganos permanentes, propios e independientes, con competencias para alcanzar los fines establecidos. Algunos de los organismos internacionales más reconocidos son la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Dos posturas

De acuerdo con Fernando Cvitanic, experto en Relaciones Internacionales, “muchas veces a los organismos internacionales les faltan dientes para poder morder: son como un perro dóberman mueco, pues no se ven los resultados de sus medidas. Para dar un ejemplo, cuando se amenazó a Venezuela con sacarlo de la OEA, la respuesta de Maduro fue reírse, al igual que Chávez, que creó organismos paralelos a esta porque no la reconocía como legítima”. 

Por otro lado, hay quienes afirman que los organismos internacionales sí son de gran utilidad, puesto que han contribuido a consolidar escenarios de cooperación entre naciones, al afianzamiento de los sistemas democráticos y a la protección de los derechos humanos.

Carlos Arévalo, jefe del departamento de Derecho Internacional de la Universidad de La Sabana, asegura que “estas organizaciones sí tienen dientes, por ejemplo, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas puede tomar decisiones que van desde imponer sanciones económicas en contra de un Estado hasta invadir un país, si lo considera pertinente”.

Estas organizaciones se entienden como foros democráticos en los cuales las naciones tienen la posibilidad de intercambiar opiniones y llegar a puntos de acuerdo. Por esto, en el caso concreto de Venezuela se ha apostado por la diplomacia.

Arévalo dice: “Muchas personas creen que la mejor alternativa para el caso venezolano es invadir el país y sacar a Maduro por la fuerza, pero, luego de eso, ¿qué vamos a hacer con los colectivos y los seguidores del régimen? Va a haber más derramamiento de sangre y se va a aumentar la división de ese país”.

El caso venezolano refleja la dualidad de visiones sobre la eficacia de los organismos internacionales. Como reconoce Arévalo, se ha avanzado en acorralar a Maduro, pero, por otro lado, como argumenta Cvitanic, aún no ha habido una medida que haya sido lo suficientemente eficaz para lograr la transición de un régimen dictatorial a uno democrático.