20/01/2025

Crisis humanitaria en El Catatumbo ¿qué pasará?

Foto generada con IA

El anuncio, realizado por el presidente a través de su cuenta de X, abre las preguntas sobre la viabilidad del proyecto de Paz Total.  Dos profesores de la Universidad de La Sabana aportan su análisis. 

Tras la suspensión de las negociaciones con el grupo armado ilegal ELN, el pasado 17 de enero, en la zona se ha vivido una escalada de violencia. En horas de la mañana en una entrevista para 6 AM en Caracol Radio, Iris Marin, defensora del pueblo, explicó la magnitud de la crisis humanitaria que atraviesa El Catatumbo, que ya deja más de once mil personas desplazadas “Anoche (19 de enero), a las seis y media de la tarde, el censo de Ocaña ascendía a dos mil ciento setenta, pero somos escépticos, yo creo que podría llegar a cuatro mil. Además de cinco mil personas en Cúcuta, dos mil quinientas personas en Tibú. Eso da más de once mil personas que se han ido”.  

Javier Osuna, profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Sabana, periodista y escritor de libros vinculados con el conflicto de la zona (Me hablarás del fuego y Cartas de ceniza), se trata de una situación desconcertante. “La situación es muy delicada porque tanto el Proceso de Paz de La Habana como la Ley de Justicia y Paz han tenido consecuencias muy negativas para la población civil”, dijo a este medio. 

Y es que, aunque los esfuerzos se han hecho, con el inicio de las negociaciones el 8 de octubre de 2023 y la puesta en marcha de una mesa de diálogo en Tibú, entre los equipos negociadores del Gobierno y el Estado Mayor Central (uno de los mayores grupos disidentes de las FARC), el proceso ha estado permanentemente en crisis a causa de las acciones de los disidentes contra las propias comunidades o la fuerza pública. 

 “El panorama es complicado y desolador ante la impunidad con la que los actores armados pueden ejercer su violencia”, comenta Osuna a propósito de los plazamientos masivos, que según Jorge Acevedo, alcalde de Cúcuta, ascienden a 8300.

Por su lado, Roberto García Alonso, profesor de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana señaló que una de las principales causas que han hecho de la zona un polvorín, son "el narcotráfico, la siembra de cultivos ilícitos y la poca presencia del Estado”. Mientras la situación parece encrudecerse, el presidente volvió a pronunciarse vía X advirtiendo que “lo sucedido en El Catatumbo no es sino una demostración más del tránsito de las guerrillas insurgentes hacia las organizaciones narcoarmadas (...) el ELN ha escogido el camino de la guerra y guerra tendrá. Nosotros, el gobierno, estamos del lado del pueblo”. 

Ante lo que parece una inminente escalada del conflicto, según un artículo del diario El Espectador los asesores jurídicos de la Casa de Nariño estudian la viabilidad de declarar estado de conmoción interior en la zona. Mientras esto sucede, los expertos consideran que el Estado se encuentra frente a una difícil situación debido a la ubicación territorial y solo con dos opciones a la mano: aumentar la presencia militar en zonas de conflicto para maximizar la percepción de seguridad y tratar de dar cumplimiento a los acuerdos de paz lo que podría minar la confianza en el proceso de paz. La segunda opción es realizar operaciones específicas para desmantelar redes de apoyo de grupos armados y priorizar operaciones de inteligencia ya que los grupos armados están reconfigurando sus estructuras en El Catatumbo. 

Por ahora, mientras se toman decisiones, las preguntas sobre las acciones del gobierno del cambio y la propuesta de la Paz Total, como uno de sus pilares, se mantienen.