“La Maestría en La Sabana me ha servido cada día de mi vida”
Carlos Téllez, graduado de la Maestría en Derecho Constitucional en 2016, es el actual director de Regulación e Interconexión de Tigo, empresa de telecomunicaciones colombiana, en donde se encarga de analizar el mercado en torno a sus competidores, observar cómo se está comportando su ecosistema y, con base en ello, encontrar las herramientas para abrirle campo a su empresa en el mercado, siempre pensando en incrementar el beneficio de los usuarios y a la competencia. Aunque nuestro Alumni no siempre se vio decantado por las Telecomunicaciones, pues comenta que su primer trabajo fue en la Corte Constitucional y tras ese primer paso tuvo que dar muchas vueltas para llegar a donde está ahora.
Su trabajo en la Corte duró alrededor de cuatro años, donde ejerció como judicante, primero en Despacho y posteriormente en la Secretaría. Estando allí tuvo la oportunidad de trabajar con un sinfín de expedientes, en el que se destacó uno que trataba sobre telecomunicaciones, lo que le despertaría su pasión por este campo laboral. Al terminar, ingreso al regulador de las telecomunicaciones donde pudo aprender sobre la realidad de un sector tan dinámico, dando un paso en su formación decidió aplicar a una Beca de la Fundación Carolina, en Barcelona, España, de la cual sería seleccionado para realizar su Magíster en Economía y Regulación, emprendiendo junto a su esposa un nuevo capítulo en el país ibérico que duraría un año.
Posteriormente volvería en el regulador esta vez de España, pero para cuando terminó sus servicios en dicho lugar, decidió inscribirse en el Mágister de La Sabana, convencido de que estaba tomando la mejor decisión, estando en lo correcto. Resulta que, durante sus años como estudiante, Carlos comprendió la importancia del Derecho Constitucional en los Servicios Públicos de Telecomunicaciones, y por ello y su primera experiencia en la Corte decidió adelantar el Mágister, convirtiendo su título en un factor decisivo para la contratación de la compañía colombiana de telecomunicaciones, Tigo, e iniciando un nuevo capítulo en su vida.
Asegura al respecto que “cada trabajo que he hecho en mi vida me ha servido para estar donde estoy ahora, pero la maestría en La Sabana me ha servido para cada día de mi vida.” Así mismo, recuerda esta época como una de las más felices, pues el campus, los amigos, las formas de estudio, los profesores y los trabajos que debía realizar fueron los componentes que le permitieron disfrutar de toda su experiencia, afirmando que no hubo un solo día, durante su maestría, que no sintiera una felicidad inconmensurable.
Por último, aconseja a los futuros Alumni que “para triunfar en cualquier cosa es fundamental tener amor y cariño por lo que haces, dedicación y paciencia. Así mismo, es fundamental tener claro que jamás debes subestimar a nadie. Cualquier enseñanza que recibas es importante para tu vida profesional, sin importar el rango de la persona que te la esté dando”.