La educación es sin duda un elemento fundamental para el desarrollo de la sociedad, como decía Nelson Mandela: “Es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo”. Precisamente, por su alto impacto en la vida de las personas y por los múltiples campos de acción que tiene como: el escolar, el académico, el cultural, el empresarial y el social, entre muchos otros. 

Adela Zornosa, graduada de la Maestría en Educación en 1991, decidió irse por un enfoque social y utilizarlo para ayudar a los más necesitados. Actualmente es la directora de la Fundación San Ezequiel en la seccional de Bogotá; su labor consiste en administrar la organización y velar porque los 300 pacientes con cáncer, que están afiliados, reciban la atención y el acompañamiento necesario para sobrellevar la enfermedad.

Adela realiza una labor completamente voluntaria y asegura que la Universidad influyó en su vocación: “La Sabana nos deja un sello en nuestro corazón de compromiso cristiano, de servicio y de proyección social y nada más concreto que vivirlo en una obra de la Iglesia como es la Fundación San Ezequiel Moreno”.

Dicen que las crisis son oportunidades de mejora. En este caso, con la llegada de la pandemia, Adela y su equipo tuvieron que optar por la creación de distintas estrategias para seguir brindándole apoyo a los pacientes; una de ellas, es el acompañamiento psicológico y la asesoría jurídica que se les ofrece virtualmente, con el fin de cuidar su salud, educarlos y darles una atención integral.

Por su parte, María Claudia Aponte, graduada de la Maestría en Educación en 1997, quiso profundizar en lo académico. Hoy por hoy, es la Vicerrectora académica y de investigación de la Universidad de América. Su trabajo consiste en direccionar la formación de los estudiantes, la investigación y toda la interacción con el entorno. “Desde que me gradúe, las bases conceptuales en especial de la filosofía y la antropología de la educación me han sido útiles para fundamentar mis decisiones, investigaciones y la formación que hago de docentes universitarios”, afirma.

María Claudia no solo es graduada de La Sabana, también la Universidad fue su lugar de trabajo durante 17 años, en los que se desempeñó en diferentes cargos como profesora, investigadora y directora de distintas áreas, asegura que: “Es un orgullo ser egresada y haber trabajado en la Universidad, pues me permitió profesionalizar mi gestión como directivo e investigador en la educación superior”.

Actualmente, esta Alumni investiga temas de internacionalización del currículo y de resultados de aprendizaje, con los que ha logrado hacer múltiples cambios estructurales, en la Universidad, para alinear el currículo con tendencias internacionales y para poder formar estudiantes globales.

Sus consultorías y su ardua experiencia, de más de 25 años, en el aula global, la política de internacionalización, la acreditación, el enfoque de formación, entre muchas otras cosas, la hicieron merecedora de hacer parte del exclusivo plantel de docentes de la InnovaHiEd Academy, institución que forma a profesores a nivel internacional.   

Ambas graduadas son conscientes de la responsabilidad social que tienen al ejercer la profesión. Por eso, cada una, desde su especialidad, plasma todos sus conocimientos y experiencias.